La solución perfecta cuando no se quieren atornillar barras o asideras a la pared o cuando la pared no ofrece las garantías y seguridad suficientes, por ejemplo en el caso del pladur. Queda fijada firmemente al suelo y se puede regular en altura sin necesidad de herramientas (solo con un pomo) para adaptarse a cualquier persona, sin que su estatura sea un condicionante. Placa en el suelo: 25 x 15 cm.